La cobertura de farmacia en el seguro de salud es la encargada de reembolsar al asegurado parte del gasto que tenga que hacer en medicinas. La aseguradora marcará el porcentaje de reembolso y fijará un límite anual de gasto.
Indice
¿Qué es la cobertura de farmacia en el seguro de salud?
La cobertura de farmacia en los seguros de salud es un complemento incluido en el seguro médico privado que permite acudir al médico del seguro y no tener que pagar el 100% del coste de los medicamentos recetados.
Con esta garantía, que es opcional y que se debe contratar como un complemento del seguro de salud, la compañía aseguradora reembolsa al asegurado una parte porcentual del coste de los medicamentos que le sean recetados.
Pero antes de contratar, conviene revisar las condiciones de la cobertura de farmacia, así como sus límites. Por regla general, esta garantía no tiene restricciones de edad, pero si existen estas se sitúan entre los 60 y los 75 años. Contar con esta prestación no obliga a la compañía a hacerse cargo de todos los productos comprados en una farmacia, sino que existen ciertas especificaciones. Además, la cobertura de gastos farmacéuticos debe ser contratada para todas las personas incluidas en un mismo seguro de salud.
Límites económicos de la cobertura de farmacia
En función de la modalidad de póliza que se contrate, cada compañía aseguradora fija el porcentaje que deberá abonar el asegurado por cada medicamento. Esta parte porcentual que cubrirá el seguro oscila entre el 50% de las modalidades más básicas de seguro de salud, hasta el 80% de los seguros más completos. Pero, además, cada póliza suele imponer un límite de gasto anual, que por regla general se sitúa entre los 200 y los 300 euros al año.
En algunos casos, esta cobertura puede contar con un periodo de carencia, es decir, un periodo de tiempo limitado en el que no se puede disfrutar de esta garantía. Esto ocurre normalmente cuando el asegurado no ha contratado esta cobertura desde el primer momento, y decide ampliar su póliza de salud a posteriori. Esta carencia puede llegar a ser de 6 meses en algunos casos.
¿Qué medicamentos cubren los gastos de farmacia del seguro de salud?
No todos los medicamentos están cubiertos por los seguros de salud. Solo lo están aquellos que hayan sido recetados por el organismo público competente y que sean necesarios para el tratamiento del asegurado. Además de cumplir estos dos puntos fundamentales, deben estar incluidos en la lista de medicamentos cubiertos por la póliza contratada.
Por regla general, entre os productos farmacéuticos incluidos en el seguro de salud suelen estar los medicamentos prescritos registrados con código nacional, los tratamientos prolongados, las vacunas y las medicinas para la alergia. Aunque esto dependerá de la aseguradora y del tipo de póliza que ofrece.
Además, algunos seguros ofrecen el reembolso de los gastos farmacéuticos que no cubre la Seguridad Social, esto es, parte del gasto en medicamentos que no está cubierto por el seguro público, siempre que estas medicinas no sean de libre dispensación. Por ejemplo, si un antibiótico, que no es de libre dispensación, cuesta 20 euros, y la Seguridad Social solo cubre 15, tu seguro de salud con cobertura farmacéutica te reembolsará esos 5 euros restantes.
¿Qué condiciones hay que cumplir para solicitar el reembolso de gastos farmacéuticos?
Para que nuestro seguro nos realizar el reembolso que corresponda por el pago de medicinas, debemos contar con una prescripción médica para esas medicinas. Algunas compañías limitarán el reembolso a la existencia de prescripciones realizadas por un médico que forme parte del cuadro de la misma compañía. Para otros seguros de salud, menos tradicionales, no es necesario que el profesional forma parte del cuadro médico de la compañía, sino que las prescripciones podrá hacerlas cualquier médico asociado o no a la aseguradora con la que hemos suscrito nuestra póliza.
¿Cómo solicitar el reembolso de los gastos farmacéuticos?
Deberás solicitar por escrito a tu compañía aseguradora el reembolso de los gastos farmacéuticos. Tendrás que cubrir un impreso de solicitud, que te facilitará la propia compañía, y adjuntar las facturas de farmacia y las recetas que te haya facilitado el médico.
Normalmente tendrás un plazo de tiempo limitado para solicitar el reembolso, que estará señalado en las condiciones de tu póliza. Este periodo puede ser de 7 días o incluso de 90, ya que dependerá únicamente de lo que especifique cada compañía aseguradora. Por ello conviene prestar atención a las condiciones en las que se prestará esta cobertura, porque si no estás atento, podrías exceder el plazo señalado y quedarte sin cobertura de tus gastos de farmacia.
Los gastos farmacéuticos en los seguros de salud para personas con enfermedades graves o crónicas
La cobertura de farmacia en el seguro de salud puede resultar interesante para aquellas personas que tienen alguna enfermedad grave o crónica y que deben comprar y tomar una gran cantidad de fármacos para su tratamiento, los cuales son muy caros en algunos casos.
Aunque existen seguros específicos para personas con enfermedades graves o crónicas, las modalidades más básicas suelen incluir esta cobertura, llegando a hacerse cargo de entre el 50% o el 80% de los gastos farmacéuticos, con una cantidad de límite anual. Si este límite está, por ejemplo, en 100 euros, debes valorar el ahorro que te supondrá al año y si te compensa, teniendo en cuenta el gasto en medicamentos que tendrás que hacer.
Cómo obtener el mejor seguro de salud para ti
En todo caso, comparar también será la clave si hablamos de cobertura farmacéutica. Si es lo que estás buscando, debes conocer condiciones y limitaciones, y realizar una comparativa de seguros de salud para obtener una opción que te convenza por completo, con todo lo que buscas y al precio más bajo.
VER OFERTAS DE SEGUROS DE SALUD
Conoce a Mario Cabrera, experto en pólizas de seguros y veterano del sector. Con más de 20 años de experiencia, Mario conoce a fondo los entresijos de varios tipos de pólizas, como las de automóvil, hogar, vida y empresa. Se enorgullece de poder adaptar los planes de cobertura a las necesidades y circunstancias únicas de sus clientes.