Tanto estés interesado en tener una idea rápida y aproximada del funcionamiento de un depósito bancario, así como si buscas como profundizar en el tema, estás en el lugar indicado. En esta sección te explicamos exactamente cómo funcionan los depósitos bancarios, qué modalidades existen y qué condiciones implica cada uno de estos tipos.
Con los depósitos bancarios podrás obtener rendimiento con tus ahorros, adaptándolo a la situación que más te interese. Los depósitos más habituales son los que van a corto plazo -en un periodo inferior a 12 meses-, a largo plazo -un plazo mayor de un año-, combinados -combinando plazo fijo y un fondo de inversión- o de plazo fijo. Depende de la forma en que quieras invertir tu dinero, tienes todas estas opciones distintas para invertir.
Estos depósitos bancarios suelen contar con un plazo que va entre los 3 y los 12 meses, incluso con opciones que tienen una duración menor a tres meses. Cuanto mayor sea el periodo de tiempo del depósito, mayor serán las posibilidades de obtener rentabilidad de tus ahorros. Esta modalidad es uno de los productos inversión por el que más apuestan los españoles, ya que cuentan con una buena rentabilidad y una gran garantía de seguridad, con muy poco riesgo de inversión.
Esta opción suponen depósitos que se extienden más allá de doce meses, por lo que durante este tiempo el inversor no puede retirar el dinero que tenga depositado. La rentabilidad de esta modalidad es mayor de las que ofrecen los depósitos a corto plazo, desde un 1,2% hasta un 3%, frente al rentabilidad del 0,10% o el 1% que se obtiene a corto. Aunque estos depósitos implican mayor riesgo, por lo general todos los depósitos son fiables y seguros gracias a las garantías que ofrecen las compañías que las gestionan.
En este caso, el depósito bancario implica que el dinero depositado en él debe estar inmovilizado un tiempo determinado que se estipula desde el primer momento. El plazo de tiempo está fijado de antemano y no se llega a cambiar en ningún momento. Se trata de un modo sencillo y seguro de ganar dinero, sabiendo de antemano cuándo termina el depósito y sabiendo cuanto acabarás ganando. Ofrecen una mayor rentabilidad que otro tipo de depósitos sin gastos ocultos.