Los créditos rápidos son una alternativa menos rígida a los préstamos bancarios. Un crédito rápido es un préstamo de dinero, que se tramita de forma muy rápida para que el cliente pueda disfrutar del dinero cuanto antes.
Si te ha surgido un imprevisto y necesitas dinero rápidamente, es posible que te plantees esta posibilidad. Aquí te contamos cómo funcionan para que consigas el mejor préstamo posible.
Indice
¿Qué es un crédito o préstamo rápido?
Normalmente, se puede hablar indistintamente de un crédito rápido o de un préstamo rápido. Básicamente, un crédito rápido es un tipo de préstamo de dinero, concedido por una entidad financiera a un cliente particular.
En general, los préstamos rápidos se caracterizan por tratarse de cantidades de dinero no muy elevadas. El dinero que se presta varía dependiendo de la situación del cliente y de las condiciones bancarias, pero estos suelen ir desde los 100 hasta los 2.000 euros.
Otra característica del préstamo rápido es precisamente la rapidez con que se consiguen. Estos créditos están especialmente pensados para aquellos clientes que necesitan poco dinero, pero muy rápido, para salir de un bache económico puntual. Por eso los créditos rápidos se pueden conseguir lo más rápido posible: entre unos 15 minutos hasta 72 horas, dependiendo del préstamo y de la entidad.
¿Cómo funciona un crédito rápido?
Si estás pensando en pedir un crédito rápido o si te interesa saber cómo funcionan, te lo contamos a continuación paso a paso. Un crédito rápido funciona de la siguiente manera:
1. Buscar y comparar créditos rápidos
El cliente necesita una cantidad de dinero no muy elevada y la necesita en un plazo de tiempo corto. Lo primero que se suele hacer es buscar créditos online y compararlos. Casi todas las entidades financieras de créditos rápidos operan online, por lo que buscar en internet es la mejor idea. En un comparador de créditos rápidos puedes comparar las condiciones de los créditos del mercado y escoger el más conveniente para ti.
2. Ponerse en contacto con la entidad bancaria
Cuando el cliente da con el crédito que mejor se adapta a lo que necesita, es hora de ponerse en contacto con la entidad financiera. En el mismo buscador es frecuente encontrar un enlace para ponerse en contacto con la entidad financiera. También puedes ir a la página oficial de la entidad financiera que hayas escogido y seguir sus instrucciones para contratar tu crédito.
3. Contratar el crédito
Al ponerte en contacto con la entidad financiera, lo más normal es que sus agentes telefónicos te llamen por teléfono. Es posible que otras entidades tarden un poco más y que les tengas que enviar tus datos personales online. Con solo esta llamada podrás contratar tu crédito rápido. En este paso, debes asegurarte de que comprendes todas las cláusulas y condiciones del contrato.
4. Recibir el dinero
La contratación por teléfono es instantánea y el dinero tardará en llegar a tu cuenta poquísimo tiempo. Dependiendo del dinero que pidas y de la entidad que escojas, el tiempo puede variar, pero normalmente lo recibirás el mismo día o en los días siguientes de haberlo contratado.
5. Devolver el préstamo en cuotas
Tras recibir el dinero y solucionar tu situación, tendrás que empezar a devolver el crédito. Dependiendo de las condiciones del préstamo, puedes devolverlo en una sola cuota o en pequeñas cuotas mensuales. El primer caso es bastante frecuencia, ya que estos préstamos son de cantidades de dinero muy bajas, por lo que no tendría sentido dividirlas en cuotas tan pequeñas. En cualquier caso, la devolución del préstamo se hace aplicándole los intereses que hayas contratado. Cuando hayas pagado y devuelto el préstamo, tu contrato habrá finalizado y ya no tendrás ninguna vinculación con la entidad ni nada de lo que preocuparte.
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[…] El atractivo de los créditos rápidos es evidente. Nos permiten conseguir dinero de una forma muy sencilla y rápida, evitando esperas y trámites y sin necesidad de cumplir demasiados requisitos. Parecen estar claramente en situación de ventaja con respecto a las entidades bancarias y los préstamos más tradicionales. Pero, ¿es oro todo lo que reluce? ¿Qué podemos encontrarnos y cómo funcionan estos créditos rápidos? […]